De acuerdo con los expertos, la muda es la renovación del manto piloso del minino, que da paso a la nueva capa que está creciendo. Este proceso resulta por demás necesario, pues de no ocurrir, el exceso de pelo muerto se convertiría en un grave problema, trayendo consigo diversas consecuencias a la salud.
Presentada por el diputado Nazario Sánchez, del grupo parlamentario de Morena, el documento se encuentra basado en diversos estudios y publicaciones que resaltan la capacidad que tienen los animales de compañía de reducir niveles de estrés, ansiedad y depresión en las personas a su alrededor.
En conferencia de prensa, el funcionario estatal explicó que al igual que en el caso de Vanessa, el menor que abusó sexualmente de otra canina, en Atlixco, también tendrá atención psicológica.
En los últimos días, una de estas invitaciones ha generado gran polémica y debate en redes sociales. ¿La razón? Las mascotas son bienvenidas, mientras que la asistencia con niños no será permitida.
Mediante su cuenta de TikTok, la usuaria @adys_craftycreations mostró la ingeniosa manera de preparar unos tacos miniatura exclusivos para caninos.
“Estamos de acuerdo, hay que continuar con el proceso en el Congreso para que se apruebe en el Senado la reforma legal, y sí, vamos a presentar una iniciativa para la reforma al artículo cuarto. Vamos a esperar el nuevo periodo de sesiones, pero ya vamos a empezar a trabajar”, declaró el mandatario en su conferencia mañanera.
De acuerdo con la investigación, sólo es castigado el 0.01% de los casos que ocurren a nivel nacional, lo anterior pese a que en 31 entidades del país el maltrato animal es considerado como un delito que alcanza penas en prisión y multas de diversos montos.
A través de su cuenta personal, el usuario @Mayrakabas compartió el emotivo momento, donde se puede apreciar al animal avanzando junto con las demás personas, esto pese a que presenta dificultades para caminar.
Encabezado por Clas Linnman, investigador del Laboratorio de Neuroimagen del Spaulding Rehabilitation Hospital, en Boston, Estados Unidos, el equipo de científicos examinó datos sobre mordeduras de perros entre 2009 y 2018 en ocho ciudades americanas: Dallas, Houston, Baltimore, Baton Rouge, Chicago, Louisville, Los Ángeles y Nueva York
