Según explica el estudio, factores como la deforestación y el cambio climático han provocado que la apodada “cuna de agua de Brasil” pierda, en promedio, alrededor de mil 300 metros cúbicos por segundo, líquido suficiente para llenar unas 30 albercas olímpicas cada minuto.
La primera trampa fue colocada en el río Tenancingo y está construida con bambú, para evitar afectar el entorno natural.
Bajo ese contexto, el mismo informe señala que la contaminación, la degradación de los hábitats, la sobreexplotación de los recursos acuíferos y los impactos del cambio climático suponen una presión continua, y apuntan a la necesidad de mejorar la resiliencia hídrica a través de una mejor gestión del líquido vital.
El Instituto de Meteorología polaco explicó que la ola de calor que ha atravesado el territorio durante los últimos días, combinada a la escasez de lluvia, provocaron que el mencionado cuerpo de agua se encuentre por debajo de los 20 centímetros,
De aquí al año 2030, el objetivo de la presente iniciativa consiste en restaurar aproximadamente 30 mil kilómetros de ríos y 350 millones de hectáreas de humedales degradados, para después brindarles protección.
