Este lunes, NVIDIA anunció que invertirá 100 mil millones de dólares (mdd) para desplegar, al menos, 10 gigavatios de sistemas en la infraestructura de inteligencia artificial (IA) de próxima generación de OpenAI, con el objetivo de entrenar y ejecutar sus nuevos modelos en el camino hacia lo que denominan “superinteligencia”.
Además del despliegue de energía y la capacidad de los centros de datos, la presente alianza contempla la implementación de los nuevos sistemas de procesadores gráficos.
Según el comunicado oficial firmado por ambas empresas, se espera que la primera fase de este proyecto entre en funcionamiento durante el segundo semestre de 2026.
“El despliegue se realizará de la mano de la plataforma Vera Rubin, de NVIDIA, superchip de IA de próxima generación, que combina las CPUs Vera y Rubin”, detalla el texto.
“El lanzamiento de Vera Rubin reemplazará la arquitectura Grace Blackwell para ofrecer un rendimiento superior en el entrenamiento e inferencia de inteligencia artificial”, continúa.