En los últimos años, Italia ha sostenido una lucha contra el turismo masivo, aplicando tasas más altas; estableciendo tarifas de entrada a importantes destinos; y prohibiendo los grupos de 26 personas o más.
Continuando con este tipo de medidas, recientemente las autoridades de la ciudad italiana de Bolzano informó que a partir de 2026, aquellos visitantes que viajen acompañados de sus perros deberán pagar un impuesto diario de 1.50 euros, es decir, unos $35.
La iniciativa, que también contempla que los habitantes abonen 100 euros por ejemplar al año, recibió el visto bueno del ayuntamiento local tras la implantación de un registro de ADN canino destinado a identificar a los dueños que no recogen los desechos de sus animales.
De acuerdo con Luis Walcher, impulsor de la medida, el dinero recaudado pretende financiar áreas verdes exclusivas para perros y reducir el impacto de su excremento en la vía pública.