Adoptar una mascota es una decisión que no sólo cambia la vida del ejemplar rescatado, sino también enriquece profundamente la vida de quien lo acoge. Y es que está demostrado que los animales de compañía son seres que ofrecen amor incondicional, fidelidad y una fuente de energía diaria que proporciona innumerables beneficios.
Ahora, además de todo lo anterior mencionado, un nuevo estudio afirma que tener perros o gatos podría, incluso, ayudar a frenar el deterioro cognitivo en las personas mayores.
Para llegar a esta conclusión, el trabajo, publicado en la revista Scientific Reports, analizó los datos de más de 18 años de SHARE (Survey of Health, Ageing and Retirament in Europe, por sus siglas en inglés), una extensa investigación sobre la salud y el envejecimiento en adultos que superan los 50 años de edad.
En esta ocasión, los autores decidieron centrarse en dos aspectos clave del funcionamiento cognitivo: la memoria episódica, evaluada mediante pruebas de recuerdos inmediatos y diferidos; y el funcionamiento ejecutivo, medido a través de tareas de fluidez verbal.
Los resultados de las diferentes pruebas arrojaron que aquellas personas que vivían con perros o gatos mostraban un deterioro cognitivo más lento a comparación de aquellos que no tenían mascotas. Por su parte, quienes tenían aves o peces como animales de compañía no mostraron diferencias significativas en este aspecto, lo cual sugiere que no todos los ejemplares domésticos generan el mismo nivel de beneficio para la salud cerebral.