Las enfermedades respiratorias más atendidas en el Estado de México son la influenza, rinofaringitis, faringitis, bronquitis, bronquiolitis, neumonía, y los pacientes que padezcan enfermedades pulmonares crónicas como bronquitis crónica, enfisema pulmonar y asma, las cuales tienden a aumentar en un 16% durante verano e invierno.
Niños, niñas y adultos mayores, son más vulnerables a padecer enfermedades respiratorias durante la temporada de otoño e invierno.
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“Siempre han sido vulnerables los menores de 5 años y mayores de 60 años, sin embargo, puede haber población que no este dentro de ese rango de edad, pero que tengan comorbilidades debido a que el sistema inmunológico se encuentra débil”, así lo señaló Emily Hernández, epidemióloga del ISSSTE.
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Además factores externos, como la contaminación o la falta de ventilación en oficinas y casas, facilita el contagio si se convive con personas infectadas por algunas de estas enfermedades respiratorias.
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El Instituto Nacional de Salud Pública, registra que tras la pandemia, el asma, la tuberculosis, el EPOC, suman 300 millones de casos al año, por lo que causan complicaciones a nivel mundial.