Las estrategias comerciales en materia de moda se están renovando en España gracias a la pandemia.
Ahora, con la proyección de pasarelas virtuales, se ha ofrecido a los espectadores una nueva modalidad de levantar pedidos de moda tras observar sus prendas favoritas en los eventos, lo que hace que el comercio de textiles se modernice.
Lograr empatía con el cliente, colocarse en sus zapatos y ofrecer servicio más allá de la exposición de un catálogo virtual empieza a ponerse de moda en ese País dotado de miles de talleres, que empezaron su historia en la casa familiar y que hoy se desarrollan en naves industriales.
Ejemplo de ello es la marca El Ganso, que ahora utiliza tejidos exclusivos de calidad inmejorable y en cortes clásicos del género sport y semiformal, forma que sus directivos encontraron para mejor estrategias y afrontar la pandemia del coronavirus.
La marca, creada en el 2004, ofrece un contacto comercial a partir de una simple videollamada, en la que asistentes virtuales capacitados en consultoría de moda no sólo mostrarán en pantalla tallas, colores y tendencias, sino que conducirán a los compradores a nuevas experiencias para garantizar su satisfacción total. Otras marcas como Scalpers y Mango han replicado esta modalidad de ventas al público, la cual se presume pronto llegará a México.