Autoridades de Sinaloa reportan seis decesos, 29 heridos y 250 vehículos robados durante la jornada violenta tras la captura de Ovidio Guzmán.
En entrevista para periódico Reforma, el gobernador Rubén Rocha dijo que lo ocurrido este jueves fue “una situación extraordinaria, de crisis” . “Un día difícil, complicado, en el que la Federación realizó un operativo a través de la Sedena, con personal de la Guardia Nacional. El operativo trajo una serie de eventos colaterales en Culiacán, Mazatlán y Los Mochis”, apuntó el mandatario.
Rocha informó que en Sinaloa se registraron 20 casos de rapiña menores, tras el cierre de las tiendas departamentales.
“Hasta este momento las cosas parecen haber llegado a su fin. Ya no tenemos gente armada en la ciudad, estamos retirando los carros con los que se bloquearon las venidas. Prácticamente ya estamos cerrando el día, estamos concluyendo con el evento. Ya estamos sin actividad delincuencial activa”, dijo el mandatario a Reforma.
“Traemos operación de limpieza y acarreo de grúas. No creemos que tengamos un saldo mayor. Los que cayeron de la delincuencia no hay venido a los hospitales”, dijo.
El mandatario lamentó que integrantes del Cártel intentaran llevarse a médicos para atender a sus heridos. Sin embargo, destacó que dicha acción no prosperó.
“Hubo tensión, pero no pasó de ahí. No creo que tengamos un saldo mayor. Se modifica de aquí a mañana”, dijo Rocha.
Al ser cuestionado sobre las diferencias de los ocurrido hoy con el llamado “Culiacanazo”, Rocha dijo que esta vez no se atentó contra la sociedad civil, no hubo ataque a familias como en ese momento.
“Hoy ocurrió el evento y de manera más marginal ocurrieron estos eventos que tenían que ver con la distracción para evitar el objetivo de la operación del gobierno federal”, anotó.
El mandatario informó que de los heridos, la mayoría son agentes de la Guardia Nacional y la policía estatal, otros son civiles que participaron en las confrontaciones.
Fuente: politica.expansion.mx