Este lunes, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ofreció públicamente el sistema de alerta de desastres climáticos que su nación utiliza a aquellos países vulnerables que lo necesiten, pues “salvar vidas es lo más importante”.
El gesto del mandatario se dio durante su participación en un acto en Brasilia para activar la mencionada red de alertas controlada por la Defensa Civil de Brasil, misma que funcionará en 36 municipios de la región noreste, catalogada como una de las más pobres a nivel nacional y que ha sido el escenario de graves sequías e inundaciones.
“Mucha gente piensa que Brasil no está preparado y no sabe hacer las cosas, pero este Centro Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres, desde donde se gestionan las alertas, nos coloca en la vanguardia para intentar ayudar a otros países a hacer lo mismo”, expuso da Silva.
En ese sentido, el líder progresista adelantó que en los próximos meses tienen previsto incorporar a la red de alertas las regiones centro-oeste y norte del país carioca, zonas que albergan ecosistemas de gran valor como el Pantanal y la Amazonía, ésta última sede de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30) en noviembre.