Tras varios años de retraso e intensas negociaciones, este fin de semana los países miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) alcanzaron un histórico acuerdo para proteger la altamar, el cual se considera vital en la lucha por salvar los océanos.
Con la frase “El barco ha llegado a la costa”, la presidenta de las negociaciones, Rena Lee, confirmó que por fin existía un consenso sobre el documento, una noticia que fue recibida con gran ovación por parte de las delegaciones reunidas en la sede del organismo.
Entre otras cosas, el acuerdo sienta las bases para el establecimiento de zonas marinas protegidas, lo que debe facilitar que se cumpla la promesa internacional de salvaguardar, al menos, el 30% de los océanos con miras al fin de la presente década.
Sin embargo, la adopción formal del tratado aún tendrá que esperar un poco más, pues los países pidieron que un grupo de técnicos garantice la uniformidad de los términos empleados en el texto y éste sea traducido a las 6 lenguas oficiales de la ONU.
La altamar, el área del océano que se encuentra más allá de las aguas nacionales de los países, representa el hábitat más grande de la Tierra y el hogar de millones de especies.