No cabe duda de que los animales sin hogar son un tema de discusión a nivel mundial, pues tan sólo en México 148 mil perros y 49 mil gatos no tienen un techo donde vivir.
Ante esta problemática, muchas soluciones incluyen la esterilización de animales callejeros, pero lo cierto es que esterilizar seres vivos no es un tema fácil de tratar. Tanto la práctica médica como la ética son puntos sobre los cuales debatir ampliamente; sin embargo, con 1.5 mil millones de mininos y caninos libres, las alternativas deben apresurarse.
La búsqueda del mejor método ha sido una tarea por demás complicada. Durante décadas, la comunidad científica estuvo buscando estrategias rápidas, efectivas, de mínimo impacto en la salud y sobretodo baratas.
Ahora, a más de dos décadas de las primeras pruebas, parece ser que finalmente los expertos desarrollaron el anticonceptivo definitivo a través de terapia génica, es decir, la modificación artificial de ciertas secuencias de genes en un individuo.
Según describe un estudio publicado por la revista Nature Communications, este hallazgo representa todo un hito de la ciencia, pues dicho método no provoca efectos secundarios en los cuerpos de los gatos. Además, la inyección aplicada podría durar mucho más y no necesita una intervención quirúrgica.
“Con una jeringa basta y el riesgo de infecciones después de cirugía desaparecen. Esto es muy prometedor”, comenta William Swanson, coautor del artículo.
¿Cómo funciona la inyección? La hormona antimulleriana es introducida en los cuerpos de las felinas mediante un virus inofensivo. Los altos niveles de la hormona alteran el estado folicular de los ovarios y propician la infertilidad de los organismos.
“Los animales inyectados no mostraron alteración hormonal alguna y, después de aparearse, no resultaron embarazados”, precisó el experto.