Este viernes, el Congreso de la Ciudad de México prohibió la exhibición física de mascotas, como perros y gatos, que se encuentren en proceso de adopción, ya sea en jaulas o vitrinas.
De acuerdo con la reforma, el objetivo es reducir el estrés en los ejemplares, pues según múltiples estudios, mantenerlos a la vista del paso de las personas de manera continua les provoca estimulación excesiva y comportamientos anormales, entre ellos movimientos repetitivos; nerviosismo; alerta constante; apatía; y agresividad.
Por tales motivos, a partir de ahora la venta y adopción de estos animales de compañía deberá realizarse mediante cita previa. Durante el proceso, tendrán que ser alojados en zonas de seguridad y protección, con alimento adecuado y agua limpia, bajo vigilancia permanente de un médico veterinario zootecnista y/o personal capacitado.
Aquellos establecimientos mercantiles, albergues o refugios que no cumplan dichas condiciones podrían ser sancionados con multas económicas de entre 150 a 3 mil unidades de medida y actualización (UMA), cifra que representan desde $16,900 a $339,000, aproximadamente.
Vale la pena señalar que esta reforma entrará en vigor 365 días naturales después de su publicación en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, tiempo durante el cual las autoridades deberán emitir los lineamientos para las locaciones y espacios para los animales.