Doña Carmen, a sus 70 años de edad, llegó desde muy temprano al panteón General de Toluca para visitar la tumba de Efrén, su hijo, quien falleció hace tres años. "Vengo a dejarle flores a mi hijo quien ya falleció, lo hago para no olvidarlo y le traigo sus flores y su veladora”
Así como doña Carmen, hay miles de mexiquenses que acuden a los panteones los días 1 y 2 de noviembre para acompañar a sus difuntos durante la celebración del día de muertos. "Es muy importante no dejar pasar este día, si bien todos los días podemos visitarlos hoy se siente diferente, estamos más cerca de ellos ya que les permiten visitarnos y es algo muy bonito" comenta Carmen.
Así como ella, Isabel asistió al campo santo para ofrecer una luz a sus padres.
"Vengo a ver a mis papás y a dejarles una cera para que pueda alumbrar su camino hacia mi casa donde ya tienen su ofrenda lista, como cada año"
Para muchos estas fechas son una bella tradición que les permite estar más cerca de sus difuntos, para otros tantos es una oportunidad para ganarse un dinerito extra limpiando tumbas y colocando flores” Tal es el caso de Arturo, quien se ofrece para realizar estos servicios a las tumbas de los muertitos, que como él, hay un promedio de 20 personas más esperando afuera de los cementerios por si alguien les solicita sus servicios.
La Secretaría de Seguridad Estatal estima que habrá un promedio de 5 millones de personas congregados en los mil 180 panteones ubicados en territorio mexiquense, cabe destacar que en algunos de ellos acostumbran velar por la noche.