Tres Pm

SÍGUENOS EN REDES SOCIALES

Google AdSense LeaderBoard
Publicado en CULTURA

Vendió millones de historietas en México. Así fue la vida de Yolanda Vargas Dulché

Sábado, 12 Agosto 2023 10:00 Escrito por 

Un 8 de agosto de 1999 se fue de este mundo Yolanda Vargas Dulché, gran escritora de argumentos de historietas mexicanas. Sus historias quedaron en el imaginario y en la vida cotidiana de millones de mexicanos. Varias generaciones se divirtieron con las travesuras de Memín Pinguín, y a su vez muchos sufrieron las desventuras de María Isabel y Yessenia.

Yolanda Vargas Dulché, autora de historietas. Imagen del Archivo Gráfico de El Universal

 

Yolanda Vargas Dulché nació en la ciudad de México un 18 de julio de 1926. Se sabe que tuvo una infancia complicada a partir del divorcio de sus padres; en una familia de tres mujeres donde el dinero escaseaba, Vargas Dulché y su hermana Elba tuvieron que laborar desde temprana edad. Fue la necesidad quien la obligó a escribir, comenzó su carrera en 1941 redactando cuentos para el periódico El Universal.

Yolanda Vargas Dulché nació en la ciudad de México un 18 de julio de 1926. Se sabe que tuvo una infancia complicada a partir del divorcio de sus padres; en una familia de tres mujeres donde el dinero escaseaba, Vargas Dulché y su hermana Elba tuvieron que laborar desde temprana edad. Fue la necesidad quien la obligó a escribir, comenzó su carrera en 1941 redactando cuentos para el periódico El Universal. Posteriormente, escribió sus primeros argumentos para historietas a los 18 años en la revista Chamaco de Ignacio Herrerías, motivada por la paga de 50 centavos por página.

Vargas Dulché y su hermana Elba cuando formaban el dueto "Rubia y Morena" de la XEW.

 

Al ver la popularidad que lograba su talento, el coronel José García Valseca, dueño y director de Editorial Panamericana, le ofreció un sueldo de 4500 pesos al mes a cambio de que sólo escribiera argumentos para la revista Pepín. De esta manera doña Yolanda poco a poco fue haciéndose de un nombre como autora representativa en la historieta mexicana. Sus argumentos preferidos eran melodramas seriados que a veces tardaban más de un año en su desenlace, en los cuales la protagonista sufría mucho para llegar a un final feliz.

A mediados de la década de 1950, Vargas Dulché y su esposo Guillermo de la Parra se separan de Editorial Panamericana y emprenden su propia editorial: Editorial Argumentos. Con el paso del tiempo la empresa fue creciendo, por lo que la fama de Vargas Dulché fue en aumento, lo que permitió sacar a la luz su revista más emblemática: Lágrimas, risas y amor, ilustrada magistralmente por Antonio Gutiérrez y en la cual se publicaron las historias que le dieron notoriedad en toda la república mexicana.

Revista Pepín. Ahí Vargas Dulché publicó sus melodramas. Fotografía de la Hemeroteca Nacional de México.

 

Todos alguna vez admiraron la abnegación de María Isabel, una trabajadora doméstica que logró superarse a base de esfuerzo y lucha; aborrecieron a Rubí, quien traicionó a su mejor amiga con tal de conseguir una vida más cómoda; se enternecieron con la picardía de Perlita en Ladronzuela, siempre rebelde y de enorme corazón; muchos reían con las diabluras de Memín y sus amigos; en pocas palabras, muchos mexicanos sintieron en carne propia los argumentos de Vargas Dulché.

Revista Lágrimas, Risas y amor: Colección Particular

 

Debido a su gran popularidad, muchas de sus creaciones se adaptaron al cine o a la televisión, tal es el caso de María Isabel interpretada por Silvia Pinal o Rubí, interpretada por Fanny Cano. Con el pasar del tiempo y en su época de mayor auge, la revista Lágrimas, risas y amor llegó a tener un tiraje de más de 4 millones de ejemplares por número quincenal, números que se agotaban a veces en menos de 24 horas.

Sin embargo, la historieta mexicana comenzó a vivir una fuerte crisis a finales de la década de 1980 y principios de 1990, por lo que los lectores, espacios y tirajes se vieron reducidos considerablemente. Editorial Argumentos cambió su denominación a Mundo Vid, y empezó a importar comics norteamericanos y mangas japoneses. Para ese entonces la televisión había ganado mucho terreno, y los lectores mexicanos de historietas reducían cada vez más. La última colaboración de doña Yolanda fue una nueva versión de María Isabel en 1997, cuyo protagónico fue interpretado por Adela Noriega.

Memín Pinguín fue uno de los personajes más conocidos de Vargas Dulché

 

De vivir una precaria condición económica, Yolanda Vargas Dulché se convirtió en la escritora más leída de México y una empresaria exitosa, sus historias paralizaban al público mexicano, incluso se cuenta que la esposa de Miguel de la Madrid la llamó a su domicilio para saber el final de la telenovela Gabriel y Gabriela, inspirada en un argumento suyo. Su residencia en la colonia El Pedregal comprobaba a todas luces el esfuerzo de su obra y la dedicación a su oficio. Un 8 de agosto de 1999 se apagó su vida, dejando así un gran vacío en la historieta mexicana. La satisfacción por su trabajo se refleja en sus propias palabras: “logré lo que yo quería, que todo el mundo me leyera”.

Por Juan Manuel Pedraza
(El Prof. Juanito)

Para saber más:

Aurrecoechea y Bartra (1993) Puros Cuentos II. Historia de la historieta en México 1934-1950, Grijalbo/CONACULTA.

Figueroa, (1997) Yolanda Vargas Dulché, una vida de lágrimas y risas en La Telenovela, esa cuarentona, México. La Jornada.

Hinds & Tatum (2007), No sólo para Niños. La historieta mexicana en los sesenta y setenta, Aguascalientes, Instituto Cultural y Aguascalientes.

Etiquetado como