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Publicado en ECO

El calentamiento global ha cambiado el destino del Ártico y del planeta para siempre: NASA

Sábado, 05 Diciembre 2020 00:01 Escrito por 

Esta semana, un investigador de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) reveló que el deshielo en el Ártico ha impactado de manera directa en el cambio climático a nivel mundial, sin importar a qué distancia se encuentre, ya que esta zona representa el epicentro de muchos de los fenómenos naturales que nos aquejan.

Marco Tedesco, quien también se desempeña como docente en la Universidad de Columbia, habló sobre su experiencia en torno al Ártico en el libro Hielo. Viaje por el continente que desaparece.

“Comencé a comprender qué es lo que está causando los cambios en esta región y qué procesos están ocurriendo desde hace más de 20 años. Finalmente, amplié mis intereses y empecé a centrarme cada vez más en el Ártico a través de trabajo de campo, expediciones, labores de teledetección y recolección de datos. Así, me fui familiarizando con el terreno”, relató.

En su obra, el autor expone que el “futuro del planeta está en manos de Groenlandia”. Esto se debe a que este territorio es el principal contribuyente para el incremento en el nivel del mar, y de esta forma controlar el tiempo meteorológico.

“A pesar de que este lugar nos parece muy lejano, lo que pasa allí tiene muchísima importancia para el resto del mundo. El Ártico es el epicentro de gran parte de los fenómenos relacionados con el cambio climático”, aseguró el especialista.

Por otro lado, Tedesco expuso que durante las últimas dos décadas, el mayor cambio climático que ha sufrido este lugar ha sido la desaparición del mar de hielo. Otra de las alteraciones ha sido el desgaste del permafrost, una capa del suelo que se mantiene congelada permanentemente, gracias a su ubicación en una de las zonas más frías del planeta.

Por último, Tedesco advierte que, tarde o temprano, el Ártico desaparecerá, por lo menos en la forma en que ahora lo conocemos; y es que los constantes cambios climáticos, sin importar lo mínimos que sean, están acabando con la congelación de la zona.

“La única manera de detener el deshielo del Ártico será con la reducción de las emisiones de CO2 e invertir en energías renovables, ya que si no reducimos los niveles de este gas en la atmósfera, sus efectos se harán notar de manera importante en las próximas décadas”, finalizó.