A partir de la década de los años 90, el cambio climático ha aumentado un 23% el número de muertes por cada 100 mil habitantes, superando así el medio millón de decesos, reveló este miércoles una nueva entrega del informe titulado “The Lancet Countdown”.
Liderado por el University College de Londres (Reino Unido), en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el presente estudio evaluó ampliamente las conexiones entre la crisis climática y la salud, incluyendo nuevas métricas sobre muertes por calor extremo.

Para esta novena edición, el reporte puso de manifiesto que la dependencia excesiva de los combustibles fósiles y la incapacidad de adaptación al cambio climático se están pagando con la vida, la salud y los recursos de subsistencia de la humanidad.
Prueba de ello es que la mortalidad relacionada con el calor por cada 100 mil habitantes ha aumentado un 23% desde los años 90, registrando una media de 546 mil muertes anuales entre 2012 y 2021.
Aunado a lo anterior, las condiciones más cálidas y secas también impulsaron el número de incendios forestales alrededor del mundo, cuya contaminación por partículas finas (PM2.5) marcaron el récord de 154 mil muertes el año pasado.
 
							