Esta semana, ONGs ambientalistas presentaron una demanda con la que buscarán frenar la expansión de megaproyectos de gas fósil en el Golfo de California, al tiempo de reconocer a la naturaleza como sujeto de derechos.
Encabezada por Nuestro Futuro, esta acción legal tiene como uno de sus objetivos principales detener el Proyecto Saguaro GNL, una planta de gas natural licuado en Puerto Libertad, Sonora, que recientemente obtuvo una autorización federal para exportación.
Bajo ese contexto, los colectivos alegan que dicha aprobación es “inconstitucional”, toda vez que pone en riesgo la integridad biológica del Golfo de California, específicamente a los cetáceos. Además, no considera los impactos acumulativos de la industria fósil en aquella región.
“Este es el inicio de un cambio de paradigma en el Derecho y en la forma de cómo la humanidad se entiende con la naturaleza”, señaló en un comunicado Nora Cabrera, directora de Nuestro Futuro.
“Hoy, las ballenas reclaman su derecho a existir. Con esta demanda, buscamos que su canto sea escuchado en los tribunales y que el Golfo de California se proteja frente a la expansión de la industria gasera”, añadió.
Vale la pena mencionar que, de prosperar, este caso podría sentar un precedente en nuestro país, al permitir que tanto especies como ecosistemas sean representados legalmente para defender su existencia.