A través de la sangre real no sólo corre elegancia, sofisticación y tradición sin límites, sino también un fuerte espíritu emprendedor. Y es que a lo largo de la historia, la familia real británica ha demostrado que sus talentos son diversos y que los negocios no escapan a sus intereses personales.
Prueba de ello es el Rey Carlos III, quien recientemente sorprendió con un nuevo giro empresarial. Resulta que el monarca de 76 años, hijo de Isabel II, reconocida por su incondicional amor hacia los animales, en especial los perros de raza Corgi, anunció el lanzamiento de su propia marca exclusiva de premios para mascotas.
Bajo el nombre de Royal Dog Treats, estos snacks son fabricados directamente desde Balmoral mediante una receta 100% natural, a base de harina integral, pollo y huevo. Según su publicidad, están hechos para “los príncipes y princesas de cuatro patas”.
A partir de esta misma semana, dicho producto ya puede adquirirse a través de su tienda en línea, la cual ofrece envíos internacionales. Cada bolsita de 75 gramos tiene un costo de 6 dólares, es decir, unos $120.