En una noticia que sin duda impactaría al mundo, una de las leyendas más famosas de la criptozoología pudo haber existido.
De acuerdo con una nueva investigación encabezada por la Universidad de Bath, en el Reino Unido, es posible que la criatura conocida como el Mounstruo del Lago Ness haya habitado las profundidades del lago escocés en algún momento de la historia.
Los científicos llegaron a esta conclusión después de analizar una serie de fósiles pertenecientes a reptiles marinos, los cuales fueron encontrados en un sistema fluvial de aproximadamente 100 millones de años de antigüedad en el desierto del Sahara, Marruecos.
Después de estudiarlos, descubrieron que se trataban de los huesos y dientes de un plesiosaurio adulto de casi 3 metros de largo, y el hueso del brazo de un bebé.
“Realmente no sabemos por qué los plesiosaurios están en agua dulce, pues se pensaba que este tipo de especies prehistóricas sólo vivían en lugares de agua salada”, señaló el doctor Nick Longrich, coautor del artículo.
“Es un poco controvertido pero, ¿quién dice que porque los paleontólogos siempre los hemos llamados `reptiles marinos´ tenían que vivir en el mar? Muchos linajes marinos invadieron el agua dulce”, cuestionó.
Si bien la investigación no asegura ni confirma que el Mounstruo del Lago Ness es real, las posibilidades de que en determinado momento un ejemplar similar haya habitado en dicho lago son reales.
Finalmente, los especialistas ingleses comunicaron que continuarán con estos estudios, a fin de conocer más sobre los plesiosaurios, su comportamiento y las razones por las que podrían haber surcado en aguas dulces.
Surgido del folclor escocés, el Monstruo del Lago Ness, también conocido como Nessie, es un animal de cuello y cola alargada que supuestamente vive en el Loche Ness, un lago localizado en la ciudad de Iverness.
Los habitantes del lugar cuentan que esta criatura ha aparecido ante miles de personas desde el año 565. No obstante, ninguna de ellas fue capaz de presentar pruebas sobre su existencia.