Pocas historias son tan hermosas como las de mascotas que logran reencontrarse con sus dueños luego de perderse por un buen tiempo. Y justo eso sucedió con la siguiente perrita de Inglaterra, la cual regresó a casa después de nada más y nada menos que 11 años.
La protagonista de este emotivo suceso es la pequeña “Crumpet”, que desapareció en el ya lejano año 2010. De acuerdo con su familia, en ese entonces llevaba poco más de tres meses viviendo con ellos.
Según medios locales, Crumpet desapareció el 6 de octubre de aquel año y diez días después fue oficialmente reportada como mascota extraviada. Su dueña, Sarah Covell, cuenta que la perrita estaba jugando con otra de sus mascotas en el jardín trasero, pero cuando fue a cerciorarse de que todo estuviera bien, ya no había rastro de la nueva integrante de la familia.
De inmediato, Sarah junto con su esposo e hijos hicieron de todo para encontrarla. Buscaron por todas partes, pegaron carteles e incluso ofrecían una recompensa a cambio de alguna información; sin embargo, ninguno de sus esfuerzos dio fruto.
Fue así que, con el paso de los años, las esperanzas de la familia fueron quedando atrás, hasta que hace unas semanas ocurrió un verdadero milagro. Resulta que el pasado 12 de junio, Sarah y su esposo recibieron una inesperada y maravillosa noticia. Un veterinario los contactó para informarles que habían encontrado a una perrita vagando cerca de un campo de golf, ubicado a pocos kilómetros de la casa de la familia.
En primera instancia, ellos tomaron la noticia con incredulidad, ya que era poco probable que aquella canina se tratara de Crumpet. Sorpresivamente, todas esas dudas desaparecieron porque, efectivamente, la perrita encontrada era su mascota extraviada, la cual había vuelto a casa ¡11 años después!
“Mi reacción al recibir la llamada fue un poco de incredulidad, para ser honesta. Es un tanto milagroso que haya regresado a nuestras vidas y cada mañana estamos como de Wow, ya estás aquí. Es un poco extraño, pero a la vez, encantador”, comenta Sarah.
“Ni siquiera sabíamos si la reconoceríamos, sabiendo que habían pasado más de diez años. Pero obviamente tan pronto como la vimos se fue contra nosotros, moviendo la cola. En ese momento supimos que se trataba de ella”, añade.
Por ahora, la familia no sabe con certeza en qué condiciones habrá vivido su mascota durante todos estos años; no obstante, aseguran que Crumpet mantiene una actitud amigable, tanto con ellos como con los veterinarios.