Un grupo de investigadores del Instituto de Biotecnología (IBt), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), está llevando a cabo estudios con secreciones cutáneas de ranas para detectar moléculas antimicrobianas, las cuales ayuden a controlar inflamaciones.
Para esta ocasión, las científicas decidieron experimentar con la especie endémica Pachymedusa dacnicolor, mejor conocida como ranita verduzca; rana cara de niño; rana verde; o rana de árbol mexicana.
“Nos estamos enfocando en péptidos con actividad dual: antimicrobiana e inmunomoduladora…Ya tenemos varios modelos, en particular para padecimientos de la piel como la psoriasis y la dermatitis atópica”, declaró para la Gaceta UNAM, Constance Auvynet, del Departamento de Medicina Molecular y Bioprocesos del IBt.
“El objetivo de nuestras investigaciones con la rana de árbol mexicana es desarrollar nuevos tratamientos que resulten seguros, efectivos y accesibles al momento de combatir enfermedades inflamatorias e infecciosas”, indicó.
A lo largo de la historia, diferentes culturas del mundo han empleado productos naturales, plantas y animales como fuentes de medicamento. En el caso de los anfibios, los péptidos se producen en grandes proporciones a través de su piel, de modo que es posible aislar suficiente material para obtener la secuencia de aminoácnidos y los científicos ensayen sus efectos farmacológicos a partir de un único ejemplar.