El Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM) revocó la destitución de tres funcionarios del Partido de la Revolución Democrática (PRD) realizada hace un par de meses por Cristian Campuzano Martínez, el dirigente estatal.
Esto porque dicha remoción fue avalada por tres de los cinco integrantes de la Dirección Estatal Ejecutiva y requería el respaldo de las dos terceras partes, por lo que era necesario que los movimientos fueran aprobados al menos por cuatro miembros.
Con la determinación, Campuzano Martínez deberá reinstalar a José Antonio Lira Colchado como representante ante el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), a Claudia Leticia Bautista Villavicencio como titular de la Unidad de Transparencia y a Norma Luz Lojero Valencia como coordinadora de Patrimonio y Recursos Financieros del partido. La última fue depuesta el 3 de julio y los dos primeros el día 4 del mismo mes.
“El pleno de este órgano jurisdiccional resuelve, por unanimidad de votos, revocar la resolución impugnada; dejar subsistentes el nombramiento y designaciones de los actores como representante propietario ante el Consejo General del IEEM, titular de la Unidad de Transparencia Estatal de la Dirección Estatal Ejecutiva y titular de la Coordinación del Patrimonio y Recursos Financieros Estatal, todos del Partido de la Revolución Democrática en el Estado de México”, determinaron los magistrados.
Lo anterior, porque el TEEM consideró que hubo una indebida interpretación de los estatutos por parte de Órgano de Justicia Intrapartidaria (quien validó las destituciones), pues tratándose de la sustitución de funcionarios del partido no bastaba la mayoría simple de la dirección estatal; además de que el análisis de las impugnaciones no fue exhaustivo y se violó el principio de garantía de audiencia. De igual manera, indicó la ponencia, para tomar decisiones trascendentales es necesaria la mayoría calificada.
Javier Rivera, secretario general del sol azteca, confió en que esta determinación, en que fue controvertida una decisión del Órgano de Justicia Intrapartidaria, siente un precedente para que, con criterios parecidos, los magistrados echen abajo la determinación de ratificar a Cristian Campuzano como dirigente estatal, pues además su remoción es respaldada por más de dos terceras partes de la asamblea.
Rivera Escalona expuso que los acuerdos de la Dirección Estatal Ejecutiva en que se aprobaron las destituciones, debió atender las formalidades estatutarias y la mayoría calificada, pues todas las resoluciones debieron votarse en el mismo sentido debido a que los estatutos obligan al consenso (unanimidad) y, de no ser el caso, a la mayoría calificada.
De igual manera, evidenció que, en el caso de la ratificación de Campuzano Martínez, llama la atención que el primero de septiembre el Órgano de Justicia Intrapartidaria recibió, a las 13:50 horas, las constancias de los plenos extraordinarios en que se destituyó al dirigente estatal, por parte del presidente de la Mesa Directiva, y apenas unas horas después, a las 17:00 horas emitió la resolución con que confirma al presidente.